Santo Domingo.- La magistrada Patricia Padilla fue suspendida como jueza del Segundo Juzgado de Instrucción del Distrito Nacional porque había sido recusada por los fiscales en la audiencia preliminar sobre un caso de 500 kilos de cocaína, y en lugar de inhibirse del proceso decidió dejar en libertad a dos de los supuestos cabecillas de la red.
Los dos favorecidos con la decisión, que los fiscales califican de ilegal, fueron Mariano de Jesús de la Rosa Santana (El Viejo) y Robinson Martínez.
Antes de que la magistrada dictara la decisión, se había producido un altercado en estrado debido a la supuesta negativa de la jueza de acogerse al procedimiento y evitar continuar con la audiencia hasta tanto la Corte de Apelación del Distrito decidiera sobre la recusación.
Es a raíz de esto que, según información de fuentes, los fiscales deciden abandonar el Tribunal, y en ausencia de ellos, la jueza emite el fallo que motivó que el Consejo del Poder Judicial la suspendiera y los inspectores del Consejo del Poder Judicial iniciaran una investigación.
La tarde de ayer la magistrada fue entrevistada en la Suprema Corte de Justicia. Las investigaciones determinarán si la jueza es sometida a un juicio disciplinario o no.