Magín Díaz prevé empuje económico para el año 2026

Santo Domingo. – El ministro de Economía y Hacienda, Magín Díaz, reiteró que República Dominicana sufrió una desaceleración económica durante el presente año, con un crecimiento que hasta octubre apenas alcanzaba el 2 %, un nivel muy distante de lo que el país estaba acostumbrado.

No obstante, el funcionario manifestó que el desempeño económico ha ido mejorando durante los meses de noviembre y diciembre, por lo que prevé que, para lo que resta del año, la economía crezca entre un 2.2 % y un 2.3 %

Díaz se expresó con optimismo y aseguró que durante el año 2026 el marco macroeconómico del país mejorará, con un crecimiento estimado en torno al 4.5 %, según proyecciones de organismos internacionales.

Al respecto, aseguró que las condiciones están dadas para que esto pueda ocurrir, como la reducción de las tasas de interés en los mercados y por parte de las reservas federales, lo que contribuirá a que el Banco Central adopte medidas similares a nivel nacional.

Además, destacó el aumento en la ejecución en la inversión pública. En ese contexto, el funcionario manifestó que se está trabajando para empujar la economía tanto desde el ámbito fiscal como desde la política monetaria.

“El banco central, en una coyuntura difícil, está logrando bajar las tasas de interés, y eso va a hacer que aumente el crédito y se dinamice la economía”, enfatizó.

Pacto fiscal

Durante la entrevista, Magín Díaz reafirmó que “no está apresurado” para impulsar una reforma fiscal, medida que, a su juicio, no es meramente económica sino también política y social.

“Yo no estoy apresurado con la reforma, lo he dicho. Yo llegué en julio, nos concentramos en el presupuesto reformulado, en aumentar la inversión pública, y en dinamizar la actividad económica”, agregó.

Sin embargo, explicó que el país sí necesita una reforma debido a un problema estructural, un déficit arrastrado desde hace más de 30 años, que obliga a las autoridades a crear un espacio fiscal que permita mayor inversión pública y la recapitalización del Banco Central, no necesariamente para aumentar los impuestos.