Publicado en Nacionales, hace 13 horas
Santo Domingo.- La Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) expresó su preocupación por las constantes convocatorias a paros de docencia realizadas por la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), al considerar que estas acciones afectan de manera directa el derecho fundamental a la educación y profundizan la crisis del sistema educativo nacional.
La entidad recordó que aunque reconoce la legitimidad de las reivindicaciones sindicales y el derecho constitucional a la huelga, estos no pueden anteponerse al mandato superior del Estado de garantizar el acceso universal a una educación de calidad, como establece la Constitución en su artículo 63.
FINJUS advirtió que las interrupciones reiteradas de clases, sumadas a decisiones que reducen los estándares de preparación y desempeño profesoral han creado un precedente peligroso que no solo debilita el aprendizaje de los estudiantes, sino que también incrementa la brecha entre la educación pública y privada.
La organización planteó que la inestabilidad en la enseñanza refleja la falta de un régimen de consecuencias frente al incumplimiento del calendario escolar y exhortó a las autoridades a establecer mecanismos legales que armonicen el derecho a la huelga con el derecho superior a la educación.
Entre sus propuestas, sugirió condicionar incentivos y beneficios docentes al cumplimiento de los días de docencia, implementar procesos obligatorios de conciliación antes de cualquier paralización, y garantizar un servicio educativo mínimo aún en contextos de huelga.
FINJUS recordó además, que el Tribunal Constitucional en la sentencia TC/0064/19 reconoció la necesidad de limitar el derecho de huelga en sectores esenciales como la educación, para asegurar la continuidad del servicio y proteger a los estudiantes.
Finalmente, la entidad afirmó que la educación no puede ser rehén de intereses gremiales ni de presiones políticas y llamó a adoptar medidas firmes, inspiradas en la Constitución y en el interés superior de la niñez para detener el progresivo deterioro del sistema educativo en el país.