
Publicado en Mundiales, hace 1 hora
Bolivia.- El gobierno de centroderecha liderado por Rodrigo Paz anunció este martes que propondrá al Congreso una reducción del 30% del gasto fiscal y la eliminación de ciertos impuestos, con el objetivo de estabilizar la economía nacional, sumida en su peor crisis en cuatro décadas.
El ministro de Economía, José Gabriel Espinoza, acompañado por el presidente Paz, informó en conferencia de prensa que la reducción del gasto fiscal para 2026 implicará una «revisión exhaustiva» del gasto público y un «reacomodo» de las instituciones estatales. Esta medida representa una reducción masiva equivalente a 4 puntos porcentuales del PIB.
Además, el gobierno buscará la eliminación de cuatro impuestos (a las grandes fortunas, a las transferencias financieras, al juego y a las promociones empresariales) para dinamizar la economía. Si bien estos impuestos representan solo el 1% de la recaudación nacional, Espinoza señaló que han generado «contradicciones» y «problemas en el ámbito de los negocios». El presidente Paz añadió que «el impuesto a las grandes fortunas ahuyentó más de 2.000 millones de dólares».
El gobierno también informó sobre deudas impagas por más de mil millones de dólares a proveedores, dejadas por la anterior administración. Los pagos se priorizarán según el retraso y se dará prioridad a los pequeños empresarios.
Paz asumió el poder el 8 de noviembre, poniendo fin a casi 20 años de gobiernos socialistas iniciados por Evo Morales (2006-2019) y continuados por Luis Arce (2020-2025).
La crisis económica actual se debe a la escasez de dólares desde 2023. El gobierno anterior agotó las reservas de divisas para mantener una política de subsidios a los combustibles.
El gobierno solicitará al parlamento que le devuelva el proyecto de presupuesto enviado por Arce para su reformulación. Los detalles específicos de los recortes en el gasto público se darán a conocer en febrero de 2026, cuando se presente el nuevo presupuesto al Congreso para su aprobación.
Durante la campaña electoral, Paz prometió recortar más de la mitad de los subsidios a los combustibles, un gasto que representa una importante carga para las arcas públicas.