Publicado en Mundiales, hace 3 horas
Kiev.- Al menos nueve personas han fallecido y cuatro más han resultado heridas este sábado como consecuencia de un ataque ruso con drones a un autobús en las inmediaciones de Bilopillia, en la región ucraniana de Sumy, han informado las autoridades locales.
«Hoy, la ciudad de Bilopillia, en la región de Sumy, sufrió otro acto de terror brutal por parte de Rusia. Los ocupantes atacaron un autobús que transportaba civiles. Hasta el momento nueve personas habían muerto y cuatro más resultaron heridas», ha informado la Policía de la región en un informe preliminar compartido a través de Telegram.
Las autoridades locales han denunciado que no se trata de «un simple bombardeo», sino de «un cínico crimen de guerra» del Ejército ruso, que ha atentado «una vez más» contra objetivos civiles «ignorando todas las normas del Derecho Internacional y de la humanidad».
Las autoridades policiales han informado asimismo de que ya han desplegado sobre el terreno un equipo de investigación que está «documentando las consecuencias del bombardeo, recogiendo pruebas y registrando todo rastro criminal». «¡Todo para que cada culpable sea encontrado y llevado ante la Justicia!», han sentenciado.
DICE PUTIN NO TIENE INTENCIÓN DE NEGOCIAR LA PAZ
El ministro de Exteriores de Ucrania, Andrii Sybiha, ha denunciado un «atroz ataque», que representa un «crimen de guerra deliberado y bárbaro», y demuestra que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, no tiene intención de negociar la paz en el país.
«En lugar de poner fin a las matanzas ya, como proponen Estados Unidos, Europa, Ucrania y otros, Putin continúa librando una guerra contra los civiles», ha lamentado el ministro, que llama a «no hacerse ilusiones» y a «aumentar la presión sobre Moscú para poner fin al terrorismo ruso».
AGRESIÓN DESPUÉS DE CONTACTOS DIRECTOS
Esta agresión se produce justo después de que delegaciones negociadoras de Rusia y Ucrania hayan mantenido en la ciudad turca de Estambul sus primeros contactos directos desde la invasión de febrero de 2022. Un encuentro cuyo resultado más concreto ha sido el acuerdo entre ambos países para canjear en un futuro próximo un total de 2.000 prisioneros de guerra, mil por cada bando.