Cortez, el espíritu alegre y la nostalgia “como el primer día”

Santo Domingo.- Con la sala llena, un repertorio poético, la sensibilidad de un público visiblemente emocionado y la melodía de un finísimo piano, el hotel Barceló, recibió a la leyenda de la canción Alberto Cortez, un gran ser humano con espíritu bromista y uno de los artistas más importantes de Hispanoamérica.

Al evento, realizado en el salón La Mancha, asistieron funcionarios del Estado como la Vicepresidenta, Margarita Cedeño de Fernández, y el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez, así como personalidades del mundo artístico como Amaury Sánchez, entre otras figuras.

El opening estuvo a cargo del cantautor dominicano Shire Baldera, ex integrante del desaparecido dúo musical “Víctor y Shire”, quien además de interactuar con el público, interpretó una selección de boleros y luego otra de rock and roll en español de los años 60.

Apoyado de la mano de dos asistentes, el cantautor argentino fue recibido con la ovación de un público adulto. Al sentarse recurrió de inmediato a su humor fino para burlarse del escenario blanco, que según él correspondía a Blancanieves. También manifestó sentirse a gusto de estar en el país y de reunirse con sus amigos dominicanos.

El artista, quien dijo que los escenarios son los mejores lugares del mundo, mantuvo un rostro sonriente y una actitud positiva que el público premió con aplausos y expresiones de cariño durante toda la noche.

En un ambiente relajado, Cortez comentó a los asistentes “ustedes pidan sus canciones que yo cantaré las que me dé la gana”, de igual modo bromeó con el Ministro de Cultura diciéndole que “después de ser un cantautor brillante se introdujo en la política”.

En su concierto “Como el primer día”, una vez más el compositor de residencia española homenajeó a Facundo Cabral, su colega y hermano, y dijo que quienes lo asesinaron una madrugada de julio del 2011 “mataron la humanidad.”
En ese mismo orden, manifestó admiración por las memorias artísticas del pintor español Pablo Picasso; el poeta chileno Pablo Neruda y el violonchelista y compositor Pablo Casals. A ellos les dedicó la canción “Eran tres” y los calificó como los artistas más influyentes del siglo XX.

Cortez, sentado en un cómodo sillón y con movimientos limitados, producto de una pasada caída, presentó un exquisito concierto que vistió a la música de poesía.

Así, acompañado con el piano de Néstor Ballesteros, el cantautor recorrió su carrera de canciones y poemas propios y de otros autores como Atahualpa Yupanqui, Antonio Machado o Miguel Hernández, por lo que está considerado como un precursor de la musicalización de obras de grandes poetas. Piezas como “Te llegará una rosa”, “A mis amigos”, “Castillos en el aire”, “Instrucciones para ser un pequeño burgués” y “El abuelo” formaron parte de su repertorio para el deleite de todos los presentes. En el concierto denominado “Como el primer día” las canciones más coreadas y aplaudidas fueron “Cuando un amigo se va” y “Mi árbol y yo”.

Ambas, son dos de las canciones más emblemáticas del amplio repertorio de “El gran cantautor de las cosas simples”. La primera, “Cuando un amigo se va”, la escribió al morir su padre, quien fue para él su mejor amigo.

Pero la canción no solo se ha convertido en un himno para despedir a las personas fallecidas en el mundo, sino también en otras situaciones. Con relación a esta pieza guarda muchas anécdotas, una de las más especiales para Cortez fue cuando Juan Pablo II fue a México por última vez.

“Ya era muy mayor y el amaba aquel país, y cuando se iba en el Papa Móvil para tomar el avión que lo alejó para siempre de México y de América, la gente le cantaba ‘Cuando un amigo se va’. Una periodista que solía viajar con él, Paloma Gómez Borrero, que es amiga mía, me lo contó. Eso me emocionó hasta las lágrimas. Me dijo: ‘Dame un disco tuyo con la canción que yo se lo entregaré personalmente a Juan Pablo II’. Y así fue. Y él me escribió…”, narró Cortez antes de su concierto en Santo Domingo, donde espera volver a cantar.

Cultura rinde homenaje a Cortez

El Ministerio de Cultura rindió homenaje al cantante argentino Alberto Cortez por su amplia trayectoria en el mundo artístico. Cortez recibió un pergamino con el siguiente mensaje: “Porque el mundo es mejor contigo. Porque tus letras y tu música nos dignifican. Porque es tu voz la de un hombre de alma noble. Porque en ti echó raíz el canto nuevo, la amistad y el amor. Solidaridad y abrazos son hermosos frutos en el jardín de la humanidad”.