Publicado en Nacionales, hace 6 horas
Santo Domingo.- NFE acumula deudas superiores a US$8,900 millones y reportó pérdidas operativas de US$197 millones solo en el primer trimestre de 2025. Además, recibió un aviso de incumplimiento por parte del Nasdaq debido a retrasos en la presentación de reportes financieros.
En Puerto Rico, la empresa suspendió el envío de GNL por una deuda en disputa de US$9 millones con la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), lo que dejó sin servicio a siete unidades de emergencia y amenaza con cortes eléctricos en plena temporada de alta demanda.
Las acciones de New Fortress Energy (NASDAQ: NFE) repuntaron un 3,3 % este jueves, a pesar de haber recibido una rebaja en su calificación por parte de BTIG, que bajó su recomendación de “Comprar” a “Neutral”. La firma de análisis justificó su decisión señalando la creciente preocupación de los inversores por la estructura de deuda de la compañía, cuyas acciones han caído alrededor de 65 % desde la presentación de resultados del primer trimestre a mediados de mayo.
Según el analista de BTIG, Gregory Lewis, el foco del mercado ha estado en la deuda, a pesar de que el próximo vencimiento significativo —por 510 millones de dólares— no se producirá hasta septiembre de 2026. Sin embargo, los bonos con vencimiento en esa fecha cotizan en los 40 centavos por dólar, lo que implica un rendimiento cercano al 90 %, reflejando la desconfianza del mercado.
Lewis explicó que las limitaciones impuestas por los pactos de deuda sobre el crédito revolvente y los préstamos a plazo restringen las recompras de los bonos de 2026, lo que deja como alternativa un posible intercambio de deuda por capital, tal como hizo la empresa en el cuarto trimestre de 2024, cuando canjeó 2.700 millones de dólares en deuda y levantó 400 millones de dólares en capital fresco.
“Esperamos que NFE tome medidas para enfrentar sus desafíos de liquidez a corto plazo”, indicó Lewis, aunque advirtió que la presión sobre el balance seguirá siendo un factor que pese sobre las acciones. En este sentido, destacó que el proyecto PortoCem, clave para el futuro de la compañía, no estará operativo hasta mediados de 2026. La planta, actualmente con un avance del 54 %, se espera que entre en funcionamiento en agosto de 2026, y podría generar entre 200 y 300 millones de dólares en EBITDA anual, beneficiándose de la demanda estacional.
BTIG reiteró que Brasil sigue siendo el principal motor de crecimiento a largo plazo para New Fortress Energy, aunque las tensiones financieras seguirán marcando el corto plazo para la firma energética.