Publicado en Nacionales, hace 2 días
Santo Domingo.- El dirigente nacionalista Luis de León, líder de la Fuerza Boschista, propuso congregar a los diferentes sectores de la sociedad en una gran concentración patriótica para demostrarle a la comunidad internacional que el pueblo está dispuesto a defender la soberanía nacional, y que de ninguna manera permitirá que le arrebaten un ápice del territorio dominicano.
En ese sentido, afirmó que el liderazgo político y las distintas fuerzas sociales, sindicales, comunitarias y culturales tienen que plantarse en rechazo a los planes antipatrióticos que buscan fusionar a ambos pueblos de la isla.
«De cara al momento actual, no se observa una solución concreta, científica y decidida en defensa de la soberanía, la identidad, la educación y seguridad nacional de nuestro país. Proponemos al Gobierno, a los expresidentes y al Consejo Económico y Social, que informen y orienten al mundo en relación con nuestra posición y decisión patriótica de defensa innegociable de nuestra soberanía, en el sentido de que República Dominicana es «libre, soberana e independiente de toda potencia extranjera», como lo manifestó nuestro fundador de la República, Juan Pablo Duarte», aseguró en un documento.
«La gravedad catastrófica de la crisis de Haití demanda, también, de una ofensiva nacional de información y orientación por todo el país, incluyendo las 31 provincias y el Distrito Nacional. Es mejor informar y comunicar al país, la gravedad de la situación, que no hacerlo por temor a una situación que genere desesperación o que el pueblo se mantenga ignorándolo todo. Es mejor la prevención que la acción, sin estar debidamente orientado y organizado», añadió.
De León, exaspirante presidencial y alto dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), destacó que cada día, la problemática de Haití se complica y amenaza la estabilidad democrática y la soberanía de República Dominicana; y que hasta este momento, «la comunidad internacional y el liderazgo de las grandes naciones miran a este país como la salida para el gran incendio de Haití».
«Es necesario que se aborde la posición de la comunidad internacional respecto a la crisis haitiana, en función de que durante más de dos años, solo se ha quedado en propuestas, promesas y declaraciones de preocupación, pero en definitiva, no han demostrado voluntad para solucionar la grave problemática de la crisis haitiana», señaló.
Por cierto, el educador y dirigente político advirtió que el país podría sufrir el ataque sorpresa de pandilleros haitianos o de las masas hambrientas de Haití, empujados por la desesperación y la pobreza rampante que vive el vecino país.
«El país debe estar seriamente preparado ante un ataque sorpresa por parte de las bandas haitianas o por las masas hambrientas de esa nación, que ante una miseria espantosa se propongan cruzar la frontera y en consecuencia, se produzca una situación fuera de control, como quiere que ocurre la comunidad internacional, que está azuzando un conflicto en el Caribe, que dé al traste con la creación de un Estado binacional, como salida al profundo deterioro existencial del hermano pueblo de Haití», expuso.
Criticó que sea utilizado, para la pacificación de Haití, a un «ejército de mercenarios con gran capacidad criminal, despiadados, que solo tienen apetito de terror y la aniquilación masiva, cuyo deporte favorito es matar, quienes usarían como cabeza de playa la Línea Noroeste y el sur profundo, en detrimento de la soberanía nacional».
«Todo parece indicar que quieren sembrar una guerra en América Latina y el Caribe, por la lucha de mercados entre Estados Unidos, China y Europa. ¡Dominicanos y dominicanas, levantémonos para defender la patria, la soberanía y nuestra Constitución!»
«¡Vamos a prepararnos para evitar que lo peor pueda suceder, y preservemos haciendo honor a nuestra bandera y nuestro discurso de paz, para buscar soluciones pacíficas a los problemas, en base al diálogo, la concertación y la compasión, sin violencia! ¡Sí a la paz, no a la violencia!», concluyó.