Publicado en Todo Incluido, hace 10 años
Por Balbueno Medina.-
La mas reciente decisión adoptada por el Tribunal Superior Electoral (TSE), rechazando el recurso de impugnación interpuesto por Guido Gómez Mazara, a la convención del PRD confirma a Miguel Vargas Maldonado como amo y señor de esa organización política.
Se podría decir que Vargas Maldonado es el perredeista mas exitoso y visionario, de los últimos tiempos, porque se trazo un plan que le resulto a la perfección para destruir esa organización política definitivamente.
A partir de ahora, el candidato y presidente del PRD no tendrá mas obstáculos para culminar el plan que inicio con la expulsión de varios integrantes de la cúpula del partido y que muchos afirman lo hizo para negociar sin problemas de ninguna índole.
Con la ejecución magistral de ese plan, Miguel Vargas Maldonado, no solo asumió la propiedad y control del partido mas viejo del país, sino que castro toda una generación de servidores políticos que acompañaron a José Francisco Peña Gómez, a levantar ese partido luego de la salida del profesor Juan Bosch en el 1973, cuando fundo al PLD.
Entre esas figuras que habían ocupado los primeros lugares en el debate político nacional se encuentran Milagros Ortiz Bosch, Rafael Subervi Bonilla, Hipolito Mejia y Hatuey Decamps, que aunque anteriormente decidió formar el PRSD también intento en los últimos dos años retomar su protagonismo en el partido blanco, donde fue nombrado como Jefe de Campaña, en las elecciones presidenciales del 2012.
Pese a que Guido Gómez Mazara se mostraba esperanzado en que el TSE iba a pronunciarse a su favor, por las supuestas pruebas contundentes que había depositado de las irregularidades cometidas en la convención, para el menos avezado de los analistas políticos eso no sucedería así por una serie de factores y circunstancias que no valen la pena seguir señalando.
Quienes sí estuvieron conscientes de la jugada maestra que hizo Vargas Maldonado para quedarse con las siglas del PRD, fueron los mismos a los que él desalojo de esa organización política que viendo que el futuro no les favorecería , por razones de edad y de circunstancias políticas , decidieron formar tienda a parte para seguir echando el pleito a través del PRM y así continuar incidiendo en la vida política nacional.
Ahora, a quien le corresponde decidir es a Guido Gómez Mazara, quien tendrá que optar por continuar siendo aplastado en el PRD o seguir el camino que antes le habían marcado Hipolito Mejía Fello Subervi Bonilla y Milagros Ortiz Bosch, quienes en sí se percataron de que nada tenían que buscar en el partido que Vargas Maldonado compro a raiz de la derrota de la reelección del 2004.
En tanto, que a los espectadores y a quienes hemos observado como han marchado los acontecimientos del PRD, desde el recrudecimiento de su crisis después de las elecciones presidenciales del 2012, solo nos queda desear que ese jacho que en 1978 nos restableció la democracia con la llegada al poder de Antonio Guzmán Fernández, no termine como la Unión Cívica Nacional (UCN), que se disolvió por su desconexión con la sociedad dominicana.
Y ojalá que Miguel Vargas Maldonado, por ganar un partido político de la forma atropellante y humillante que ha sido su triunfo en el PRD, no termine en el zafacón de la historia nacional como el liquidador de ese otrora bastión de las masas populares del país.