Publicado en Mundiales, hace 8 años
El cuerpo del joven, que usó una pistola, fue hallado en una calle aledaña del centro comercial donde se produjo el tiroteo, con signos claros de suicidio, informó en rueda de prensa el jefe de la Policía muniquesa, Hubertus Andr‰, para añadir que se desconocen totalmente los motivos de su ataque.
Además de los nueve muertos en el tiroteo, hubo 21 heridos de diversa consideración, entre ellos algunos niños; 16 siguen ingresados y tres están en estado grave. “De momento no vemos ninguna similitud”, respondió el mando policial al ser preguntado sobre paralelismos con el atentado cometido el lunes por un refugiado afgano de 17 años que, inspirado en la propagada yihadista, atacó con un hacha y un cuchillo de los pasajeros de un tren regional, con un balance de cinco heridos.
La policía, recalcó Andr‰, trabaja sobre un tiroteo y no puede avanzar si se trata de un atentado o de acto de locura porque desconoce los motivos del joven, cuyo entorno está siendo investigado.
El ataque se produjo sobre las 15.50 GMT y mantuvo durante horas en vilo a las fuerzas policiales de la ciudad, hasta que poco antes de las 00.00 GMT del sábado se desactivó la alarma.
El ministro alemán de la Cancillería, Peter Altmaier, había hecho hincapié en que se investigaba en todas direcciones, sin descartar ni un ataque ultraderechista ni un atentado yihadista, pese a no existir indicios en esa dirección.
Poco después del tiroteo un portavoz policial había indicado asimismo que éste se había abordado como un atentado terrorista porque los testigos informaron de que el ataque había sido perpetrado por tres personas con armas largas.
Andr‰ indicó finalmente, una vez esclarecida la situación, que se investigó a dos personas que habían huido a toda velocidad en un automóvil de la hamburguesería donde comenzó el ataque, pero que luego se comprobó que no tenían nada que ver con éste. La activación de la alerta antiterrorista se decidió ya que permite disponer de los efectivos de todos los cuerpos policiales, incluido el cuerpo de elite GSG-9, creado en 1972 tras la toma de rehenes de los Juegos Olímpicos de Múnich.
EL RELATO DE UN SOBREVIVIENTE
El testigo Luan Zequiri dijo que estaba en el centro comercial al momento del incidente. Le comentó a la televisora alemana n-tv que escuchó al atacante gritar un insulto contra los extranjeros y “luego se escuchó un grito realmente fuerte”. Afirmó que solo vio a un atacante, quien vestía botas militares y una mochila. “Volteé en su dirección y le disparó a dos personas en las escaleras”, dijo Zequiri, quien dijo que se ocultó en una tienda y luego corrió cuando dejó de escuchar la conmoción y vio en el suelo los cuerpos de las personas muertas y heridas.
El Ministerio del Interior de Alemania indicó que la policía de Múnich había establecido una línea telefónica especial para los ciudadanos que deseen comunicarse. Los habitantes de la ciudad abrieron sus puertas a personas que busquen refugio utilizando el hasthag de Twitter (hash)opendoor. En esa misma red social, la policía les solicitó a las personas que se abstengan de emitir especulaciones sobre el ataque.