San Juan está en contra la minería de GoldQuest

San Juan de la Maguana, la “Granero del Sur”, se encuentra en pie de lucha. Sus habitantes han manifestado de manera contundente su rechazo al Proyecto Romero de la minera canadiense GoldQuest. La preocupación es palpable: la explotación de oro y cobre en sus tierras, a pesar de las promesas de desarrollo y empleo, representa una amenaza latente para el futuro de la provincia.

Los argumentos en contra son sólidos y se centran en la protección del medio ambiente y los recursos naturales. La provincia es una zona de alto valor agrícola, con una producción que sustenta a miles de familias. La posible contaminación de sus ríos, como el San Juan, y la degradación de sus suelos por el uso de químicos tóxicos en la minería a cielo abierto, son riesgos inaceptables. Además, el proyecto se ubica cerca de importantes áreas de producción de agua, vitales para el consumo humano y las actividades agropecuarias.

La historia ha demostrado que la minería metálica a gran escala, si bien puede generar ingresos a corto plazo, a menudo deja un legado de pasivos ambientales y sociales difíciles de revertir. Los sanjuaneros no quieren ser testigos de un ecocidio en su propia tierra, ni hipotecar su futuro por una actividad que, una vez terminada, dejará un desierto ambiental.

El llamado de San Juan de la Maguana es claro: la preservación de su riqueza natural y la salud de sus habitantes están por encima de cualquier interés económico. Es un clamor por el respeto a su territorio y a su forma de vida, un grito que resuena en defensa de la soberanía sobre sus recursos y el derecho a un desarrollo sostenible.

El gobierno dominicano tiene la responsabilidad de escuchar y actuar en consecuencia, priorizando el bienestar de sus ciudadanos sobre los intereses de las corporaciones mineras.