La imagen es publicada en medio del vacío de poder en el Vaticano, tras la reciente muerte del papa Francisco. Mientras el mundo católico espera la celebración del cónclave que elegirá al nuevo pontífice, Trump aprovechó el momento para sugerir que él mismo sería una buena opción para ocupar el trono de San Pedro.
“Creo que sería un gran papa. Nadie lo haría mejor que yo”, dijo el mandatario en tono relajado durante una entrevista con un medio conservador estadounidense, donde también comentó que “la Iglesia necesita liderazgo fuerte, y yo soy fuerte”.
La imagen, que lo muestra con sotana blanca, mitra y cruz dorada, fue generada mediante inteligencia artificial.
Trump no es ajeno a la controversia y ha utilizado con frecuencia las redes sociales para generar atención mediática, incluso en momentos solemnes o sensibles. Esta vez, su incursión en el terreno religioso no ha pasado desapercibida.