Publicado en Mundiales, hace 2 días
Islamabad.- Al menos un prisionero murió y varios resultaron heridos en un motín que siguió a una fuga masiva de más de 100 reclusos en la prisión de Malir, en la ciudad portuaria de Karachi, en Pakistán, después de que se derrumbara un muro debilitado por recientes sismos.
«El miedo y el pánico se extendieron entre los prisioneros tras un terremoto, y más de 100 prisioneros escaparon aprovechando un muro que había sido debilitado por los recientes sismos», explicó a EFE Akram Hussain, oficial de policía en el cuartel general de Karachi.
Según el oficial, 76 de los que escaparon han sido detenidos y las autoridades continúan la búsqueda para localizar a los demás.
La ciudad de Karachi, de la provincia de Sindh, ha experimentado una serie de sismos de menor escala en las últimas 48 horas, con una magnitud de entre 2,6 y 3,4.
Tras estos eventos sísmicos, los prisioneros fueron trasladados de sus barracones habituales como medida de precaución. Aprovechando la situación y la integridad estructural comprometida del muro, más de 100 prisioneros atravesaron la sección dañada y huyeron, según el oficial.
Videos compartidos en redes sociales supuestamente capturaron sonidos de fuertes disparos en las inmediaciones de la prisión de Malir. Algunas imágenes también mostraban a individuos que se cree que son reclusos corriendo por las carreteras cercanas a las instalaciones.
Según Hussain, el incidente provocó heridas a tres miembros del Cuerpo de Fronteras (FC), una fuerza paramilitar en Pakistán, como resultado de una estampida y un motín dentro de la prisión.
«Cinco prisioneros resultaron heridos y, trágicamente, un prisionero murió durante la fuga», declaró el oficial.
El subinspector General de Prisiones, Hassan Sahito, informó a medios locales que la prisión de Malir alberga actualmente a aproximadamente 6,000 reclusos.
«Después del terremoto, hubo pánico entre los prisioneros y no solo rompieron el muro, sino que también intentaron forzar los candados», dijo.
El ministro del Interior provincial, Zia-ul-Hassan Lanjar, se dirigió a los periodistas y declaró que el incidente se atribuyó al desastre natural del terremoto, descartando negligencia por parte de las autoridades penitenciarias.
El ministro también aseguró al público que se mantenían registros completos de todos los prisioneros y que entre los que escaparon no había individuos clasificados como peligrosos o involucrados en terrorismo.
Hussain mencionó además que se presentarían casos legales separados contra los prisioneros fugados, con acusaciones como daños a la propiedad gubernamental, derribo de la puerta de la prisión y agresión al personal de seguridad.
El inspector General de la policía de la provincia de Sindh, Ghulam Nabi Memon, dijo a los medios que la mayoría de los prisioneros fugados estaban encarcelados por delitos relacionados con drogas. «El incidente no fue planeado», afirmó el jefe de la policía provincial.